SENTADAS BASES DE COORDINADORA NACIONAL INTERSINDICAL

Una perspectiva favorable para el sindicalismo independiente fue desbrozada en Melgar, el 9 de febrero, por el 2° Encuentro Nacional; intersindical, en que participaron la Federación de Trabajadores Metalúrgicos -Fetramecol- filial de la CTC, y un buen número de sindicatos confederados. Las organizaciones presentes decidieron por unanimidad sentar las bases de una Coordinadora Nacional Intersindical.

Asistieron, por Fetramecol, Marco A. Córdoba y Angel Orjuela; Agustín González, Yesid García e Iván Toro, por el Comité Nacional de Solidaridad; Jorge Santos, presidente de la USO; Jairo Gutiérrez, presidente de Acción Sindical Antioqueña, ASA; Heberto López, presidente de Sittelecom; Olger Forero, secretario general de ACEB; Avelino Niño presidente de Sinucom; Gilberto Marulanda, por el Comité Intersindical de Santander, y directivos del sector metalmecánico. Tomaron parte las deliberaciones voceros de Sindes, Anebre, la Asociación Nacional Enfermeras, Sintrainc y Sintraceat General del Valle. En la mesa directiva estuvieron, además, el doctor Fernando Cepeda Ulloa, conocido ensayista y politólogo, y el compañero Marcelo Torres, del MOIR.

Instaló el Encuentro Marco A. Córdoba, con un llamado a intercambiar puntos de vista sin prevenciones y con espíritu abierto. Posteriormente, en su intervención central, Córdoba planteó una posición “independiente de los centros internacionales de poder», y exhortó al movimiento obrero a superar la dispersión. Jorge Santos, presidente de la USO, cerró el evento haciendo hincapié en la trascendencia de la tarea acometida. Señaló que el proletariado no podrá someter a la gran burguesía si no sabe extraer de su propia experiencia las lecciones sobre la táctica revolucionaria de la clase obrera. En tal sentido Jorge Santos destacó el reciente acuerdo firmado en Telecom, que «significa -dijo- un ejemplo positivo del correcto manejo de la táctica». Se transcriben en seguida apartes relevantes de la Declaración y Plataforma de Lucha aprobada por el 2° Encuentro de Melgar:

La división imperante en el movimiento sindical colombiano, reflejada en la existencia de cuatro centrales obreras, un vasto sector de sindicatos independientes y un gran porcentaje de trabajadores no sindicalizados, es el resultado de las políticas de los partidos tradicionales liberal y conservador, que desde los inicios del proceso de organización sindical han controlado ideológica y políticamente importantes sectores del sindicalismo confederado. Un factor que ha coadyuvado a la permanencia de esta situación en el seno del obrerismo organizado es la contemporización de la corriente sindical prosoviética con la política burguesa en el movimiento obrero.

Sobre el Terrorismo
El proletariado colombiano ha sido ajeno al terrorismo y no ha practicado métodos como el chantaje, la extorsión y el secuestro, puesto que éstos se confunden con la delincuencia común y le dan a la represión estatal excusas para atacar y silenciar el descontento del pueblo. Estas prácticas facilitan la acción de los explotadores y entorpecen la labor educativa y organizativa de los explotados.

La Crisis Económica
La crisis por la que atraviesa la economía nacional es el fruto de las seculares ataduras de nuestra producción industrial y agrícola, a los intereses de los monopolios nacionales y extranjeros, acentuadas por la política del actual gobierno belisarista de acatamiento pleno a las «recomendaciones» de los organismos financieros internacionales, tales como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, de descargar la quiebra sobre las espaldas del pueblo trabajador.

La Unidad Sindical
Los trabajadores colombianos necesitan de la unidad del movimiento sindical para lograr sus reivindicaciones y contribuir a la lucha del pueblo. colombiano por la independencia nacional y contra la oligarquía y el imperialismo. El proletariado necesita una organización que lo aglutine nacionalmente, que pueda defender sus conquistas, exigir sus derechos y fortalecer sus luchas. Sin embargo, a la clase obrera bajo el yugo imperialista y en la situación de esclavitud asalariada le resultó muy difícil conseguir y consolidar una organización sindical nacional. La débil influencia de las políticas consecuentes, el predominio de la ideología burguesa, la nefasta actividad de los agentes patronales, la conciliación de la CSTC, el apoliticismo, han sido algunos de los obstáculos más serios para que la clase obrera corone con éxito éstas y otras tareas que históricamente le corresponden.

La unidad orgánica del movimiento sindical debe contemplar:

a.- La defensa irrestricta de los intereses inmediatos y estratégicos del proletariado y demás sectores populares. Ello implica, además de los conflictos por las reivindicaciones económicas de los trabajadores y del comportamiento solidario con sus hermanos de clase, la lucha por la liberación nacional y la revolución social.

b.- La lucha por aislar y derrotar los agentes patronales y gubernamentales enquistados en el movimiento sindical y consecuencialmente, luchar contra el apoliticismo y por la elevación del nivel político y cultural de las masas trabajadoras.

c.- El fundamento básico organizativo es la democracia sindical, es decir, la minoría debe someterse a la mayoría y ésta debe respetar las opiniones de aquella, preservando un ambiente propicio para la confrontación de ideas en torno a la táctica y a la estrategia del movimiento sindical.

d.- Apoyo a la unidad de acción alrededor de las luchas concretas de los trabajadores, buscando condiciones favorables para que sus batallas por las reivindicaciones económicas y políticas culminen exitosamente.

e.-El respeto al derecho de los pueblos a la autodeterminación nacional y la práctica de la más amplia solidaridad internacional con los obreros del mundo que sufren la opresión imperialista o la sojuzgación del socialimperialismo soviético.

Convocatoria
Celebración del III Encuentro Nacional o Congreso Nacional para dar paso a la conformación de una Coordinadora Nacional Intersindical (CNI) que aglutine a los sectores que compartan estos criterios y que se convierta en una alternativa independiente de los centros de poder internacional. Para ello se constituye un Comité Preparatorio encargado de fijarle fecha, organizarlo y reglamentarlo conformado así:

Dirección Nacional:
Agustín González –CNSS-, Angel Orjuela Fetramecol, Jorge Santos USO, Heberto López Sittelecom, Olger Forero ACEB.

Comité Asesor:
Marco A. Córdoba, Yesid García, Iván Toro, José Fernando Ocampo.