Los campesinos de las veredas del corregimiento de los Andes, cercano a Plato, Magdalena, se están organizando para enfrentar la violencia terrateniente como producto de la cual 25 familias fueron desalojadas de sus tierras.
La colonización de esta región se inició a finales de los años sesenta. Familias provenientes de todo el país se radicaron en los montes de los alrededores, los adecuaron para la producción agrícola y establecieron varias veredas. Hace dos años, después de innumerables trámites, los campesinos lograron por fin que el INCORA les titulara las tierras.
Los latifundistas de la zona llevaron entonces un bulldozer para desmontar algunos terrenos y desvirtuar el argumento de su no explotación y, de paso, arrasar con viviendas y cultivos. «Nos echaron encima la máquina y trajeron carabineros a cuidarla, pero nosotros protegimos nuestras casas parándonos delante», relata un campesino.
La persecución contra los campesinos se intensificó. La policía irrumpió en tres viviendas para apresar a sus moradores. Al no encontrar a uno de los hombres buscados, golpearon a su mujer y la violaron.
Entre diciembre y enero pasados, matones a sueldo de los terratenientes quemaron seis casas, tumbaron otras tres, derribaron las cercas e introdujeron 400 reses que acabaron con los cultivos. En febrero incendiaron otras 17 viviendas. La noche del 7, descerrajaron un disparo entre las cejas del agricultor José Hernández, quien se encuentra en el Hospital Universitario de Cartagena con la bala alojada en la base del cráneo. El 28, después de atropellos y crímenes sin nombre, las últimas tres familias que permanecían en El Socorro vieron arder sus ranchos.
Los campesinos desalojados han encontrado en las veredas vecinas la solidaridad de los demás trabajadores, que los han recibido en sus viviendas y comparten con ellos el agua y la comida. Por esta razón saben, como lo expresó uno de ellos, que «la unidad del pueblo es la única vía que tenemos para enfrentar esta humillante situación y algún día poder terminar con ella definitivamente».