Afirmaron huelguistas de gaseosas colombianas
En los predios de Carlos Ardila Lulle, el “Rockefeller” santandereano, 1.150 trabajadores adelantan desde el 12 de febrero una valerosa huelga. “Con los crespos hechos se quedó el patrón, porque no puedo seguir jugando al paralelismo sindical, al que le pusimos fin después de 14 años”, dijo José A. Chaparro, presidente del sindicato de industria. En efecto, se leen en la carpa huelguística consignas relativas a la “unidad contra el monopolio entre los dos sindicatos”, filiales de CSTC y UTC, respectivamente. Chaparro dijo que “hoy los salarios son en promedio de $2.300”. en tal sentido, el dirigente desmintió un comunicado publicado por la empresa en los principales diarios del país: “No es cierto que el salario suba $120 diarios. Las que sí están por las nubes son las utilidades de la empresa”.
El movimiento se mantiene firme y la unidad es total. El monopolio de las gaseosas, acostumbrado a aprovecharse de la división, se ha visto frenado en sus propósitos por los trabajadores. Es una prueba más del auge de las luchas reivindicativas del proletariado colombiano.