“El país va, pues, a la carrera, hacia una emboscada mortal. Y en consecuencia, el MOIR acude de nuevo a los estratos y agrupaciones sociales que estén dispuestos a evitar la consumación del atentado. Empuñemos con firmeza el cometido de proteger las actividades productivas e impidamos que se haga de la conciencia patria un costal de carbonero.
Retomemos lo rescatable del pasado y construyamos un brillante porvenir. Forjemos el más amplio frente único por la salvación nacional, en procura del cual venimos combatiendo desde 1986, no al estilo de un Álvaro Gómez Hurtado, a quien no le entablaremos demanda por los derechos de autoría intelectual, pero sí le recordamos que la consigna se concibió…para velar las armas de la grandeza de Colombia. Que Estados Unidos no cure sus falencias, ni libre sus disputas comerciales, ni salga de su actual ciclo recesivo a costa de las bancarrotas, las miserias y los sufrimientos de los pueblos de América”.