Desde hace cien días, el ejército mantiene encarcelado a Juan Simón Rico dirigente del MOIR en la intendencia del Arauca y secretario de la organización campesina de esa región, Ocida. El camarada fue arrestado el pasado 25 de enero y trasladado a la cárcel de Yopal, Casanare, donde se le ha querido aplicar el Código Penal Militar con acusaciones desde todo punto de vista falsas.
Ante la falta de pruebas en su contra, las autoridades han demorado los procedimientos, buscando además entorpecer la campaña electoral del FUP en Arauca.
Atropellos en Caucasia
El 28 de marzo pasado, ante centenares de personas reunidas en Caucasia, Antioquia, para presenciar la última etapa de la «Clásica Ciclística del Bajo Cauca», un policía disparó contra Nicolás Pasos Zabaleta, de 24 años, popular deportista y comerciante de la localidad. Nicolás fue conducido posteriormente al hospital, pero falleció antes de llegar.
En las primeras horas de la noche se presentaron airadas manifestaciones de protesta en los barrios periféricos, y al día siguiente más de 15 mil vecinos del pueblo convirtieron el entierro del compañero en un acto de denuncia contra el gobierno. Cuando el cortejo fúnebre iba llegando al centro de la población, elementos de la fuerza pública disolvieron la marcha e hirieron a otras cinco personas. La ciudad fue militarizada por unidades del ejército traídas desde Montería, Montelíbano y Medellín, y el 30 de marzo quedaron detenidos 16 ciudadanos, a quienes la justicia penal militar condenó a 12 meses de cárcel. Entre ellos figura María Eugenia Arteaga Giraldo, militante del MOIR.