FILANDIA DERROTÓ ALZAS DE TARIFAS

Cuarenta y ocho horas después de que empezaron a llegar las facturas del servicio de luz con un aumento del 250%, la población de Filandia, Quindío, se amotinó el pasado 12 de agosto, en indignado rechazo al atropello que la Corporación Autónoma Regional del Quindío (CAR) intentaba cometer y llevó a cabo un exitoso paro cívico que contó con la participación de trabajadores, comerciantes, estudiantes y amas de casa.

Amenazantes, las autoridades conminaron en vano a la reapertura del comercio y cuando la fuerza pública enviada desde Armenia trató de romper el bloqueo de las vías, una iracunda manifestación congregada en la plaza principal cargó contra los uniformados. Luego de severos enfrentamientos y gracias a la firmeza del movimiento, el pueblo logró que la tropa fuera retirada y que una comisión de la CAR se desplazara hasta allí, ese mismo día, para negociar.

En una abigarrada asamblea presidida por el dirigente popular William Velásquez, los azorados funcionarios de la Corporación se vieron en la obligación de revisar las tarifas y no tuvieron más remedio que anular los recibos.