A todos los militantes
El proletariado y los pueblos del mundo afrentan hoy con profundo dolor la muerte del camarada Mao Tsetung, el esclarecido maestro que les señaló un camino de victorias en la larga marcha hacia su liberación definitiva. Conmovido íntimamente ante esta pérdida y como el mejor homenaje a su memoria, nuestro Partido ha expresado su firme determinación de convertir su dolor en fuerza, a fin de contribuir a impulsar las tareas históricas que le corresponden al proletariado y al pueblo de Colombia.
Para el cumplimiento de este propósito es justamente indispensable intensificar y sistematizar el estudio del marxismo–leninismo y del desarrollo que en todos sus aspectos le dio al camarada Mao Tsetung. Al hacerlo, debemos partir del hecho de que, si bien podemos proclamar que siempre nos hemos atenido a los principios del marxismo–leninismo–pensamiento de Mao Tsetung, nuestro nivel teórico es aún bajo y está rezagado en relación con la rica practica revolucionaria de nuestro pueblo, siendo éste un problema cuya solución es más urgente y necesaria en momentos en que el imperialismo norteamericano a través del gobierno vendepatria de grandes terratenientes sume cada vez más al pueblo en la miseria y la opresión; en momentos en que ese mismo imperialismo, asediado por contradicciones insuperables que lo hacen declinar hacia una posición defensiva, y el social imperialismo soviético, comprometido por los dirigentes revisionistas de Moscú en una ofensiva general expansionista, libran una encarnizada contienda por repartirse el planeta, recurriendo a la amenaza, la intervención, el saqueo y la invasión contra los pueblos nacionales, especialmente contra el tercer mundo.
En consecuencia, todos los militantes del Partido debe empeñarse en el estudio del legado teórico comunista del camarada Mao Tsetung: su posición proletaria, su punto de vista materialista y su método dialéctico, haciéndolo de manera viva, es decir, en estrecha vinculación con la historia y la situación concreta de Colombia y con el movimiento revolucionario de nuestro pueblo. En particular, dicho estudio debe estar encaminado a:
Resolver los problemas de la construcción del partido y el impulso a la política de unidad amplia con todas las clases, sectores, organizaciones y personas dispuestas a luchar por la liberación nacional.
Cumplir, siguiendo el ejemplo del camarada Mao Tsetung de inagotable confianza en las masas y de vida sencilla y lucha ardua, nuestra línea de integrarse perdurablemente con las masas, ponerse incondicionalmente a su servicio y colocarse al frente de ellas y dirigirlas en sus crecientes manifestaciones revolucionarias de indignación y rebeldía.
Emprendamos una campaña
de difusión, investigación
y estudio del pensamiento
de Mao Tsetung
Crear una actitud y un ambiente políticos que nos permitan –acogiendo la enseñanza del camarada Mao Tsetung de ser sinceros y francos, leales, activos y honrados, de no perseguir intereses egoístas, no urdir intrigas en el seno del partido y entregarse de todo corazón a la causa de la liberación nacional y la revolución- no sólo no temerle a la critica y a la autocrítica sino utilizarlas audaz y eficazmente para fortalecer nuestra organización, mejorar nuestro estilo de trabajo, acrecentar nuestra capacidad de lucha y conservar nuestro rumbo revolucionario.
En la aplicación de esta directiva, los organismos partidarios a diversos nivel deben emprender una campaña de difusión, investigación y estudio del pensamiento de Mao Tsetung, en cuyo desarrollo debe procurarse la celebración de actos, conferencias, intercambio de experiencias, seminarios, exposiciones, etc. Todo el Partido debe concentrar esfuerzos en la realización de esta tarea a fin de que del estudio de manera viva del pensamiento de Mao Tsetung surjan más y mejores fogoneros de la revolución colombiana!
Comité Ejecutivo Central
Septiembre 10 de 1976