Aprobado en Bogotá, el 3 de agosto de 1974.
1) AVANCEMOS UNIDOS HACIA UNA AUTÉNTICA CENTRAL OBRERA, INDEPENDIENTE Y DEMOCRÁTICA.
1973 se inició con la imposición de más medidas anti-populares de la oligarquía gobernante que atentan y asaltan los intereses económicos y burlan los derechos democráticos de la clase obrera y las masas populares colombianas.
La alianza burgués-terrateniente en el poder, aplica así las antipatrióticas políticas que exige el capital monopolista norteamericano y que le permiten aumentar sus fabulosas ganancias, saqueando nuestras riquezas en todos los frentes e impidiendo el desarrollo independiente de nuestra economía, que con la propiedad monopolista e improductiva de la tierra por los terratenientes, son las causas fundamentales del atraso de nuestro país y de la superexplotación, opresión y miseria de las clases trabajadoras y populares colombianas.
Especial atención y esfuerzo dedican el imperialismo y sus lacayos nacionales a golpear a la clase obrera.
Eso indica la integración a la política del gobierno de las recomendaciones de la OIT del llamado “plan de pleno empleo”, la imposición de decretos como el 939 y la ley 48 de 1968 que recortan el derecho de huelga e implantan los fatídicos tribunales de arbitramento obligatorio; del 3135 y 1848 que quitan el derecho de organización a los trabajadores oficiales; el impulso al sitema de contratistas, al paralelismo sindical y la legalización de los contrapliegos patronales; el anunciado tribunal nacional de arbitramento; y la reforma al calendario laboral que cursa nuevamente en el Congreso, que quita el dominical triple, los festivos y el porcentaje sobre horas extras y el trabajo nocturno, etc.
Todo esto unido a la asfixiante situación económica que soportan las masas populares debido al alza desenfrenada en el costo de vida mientras amenazan con congelar los salarios.
Capítulo aparte merece el vulgar asalto a nuestras cesantías a través de los llamados FONDOS REGIONALES DE CAPITALIZACIÓN SOCIAL Y FOMENTO ECONÓMICO, engendro del imperialismo yanqui, y sus socios nacionales que estarán controlados por éstos y sus acólitos que dicen representar la clase obrera, y serán sus beneficiarios. Sin detenerse el gobierno en su campaña por robarse las cesantías de los trabajadores, el Ministro de Trabajo ha dictado la resolución 295 por medio de la cual se impide y dificulta el trámite de pago de prestaciones sociales.
Estas políticas proimperialistas cuentan con apologistas y servidores incondicionales infiltrados en las organizaciones obreras. Tal papel lo vienen desempeñando las camarillas dirigentes de la UTC y CTC que encabezan Tulio Cuevas y Raquel Mercado, feroces opositores de la unidad en las filas obreras, agentes del anticomunismo más vulgar y obstáculos para la defensa real de los derechos e intereses obreros y populares.
Pero la lucha de la clase obrera no la detiene nadie. Desafiando la criminal persecusión y represión del proimperialista gobierno del “frente social” de Pastrana, el proletariado avanza en su lucha antiimperialista y antioligárquica a la cabeza del pueblo colombiano. La clase obrera superará todas las dificultades y obstáculos que se oponen al cumplimiento de su misión histórica como fuerza dirigente del proceso revolucionario de liberación nacional del yugo yanqui y la realización de las transformaciones democráticas.
Conquistará sus derechos de organización, contratación, expresión, reunión, movilización y huelga e inevitablemente mantendrá su puesto de vanguardia en la lucha por la auténtica democracia para las masas populares. Y la situación le es favorable. Los campesinos, estudiantes, maestros, artistas e intelectuales luchan valientemente por sus derechos y gradualmente agudizan la lucha general contra el imperio yanqui y las clases dominantes. Esa es la tendencia general de la etapa actual de nuestro país.
Esta situación ha permitido en Santander, que los sectores más avanzados de la clase obrera, entren a realizar serias, claras y fraternales discusiones.
Como tal, las direcciones ejecutivas de la FEDERACIÓN SANTANDEREANA DE TRABAJADORES, FESTRA, Y EL BLOQUE SINDICAL INDEPENDIENTE DE SANTANDER-MOIR. Comprendiendo la necesidad de agilizar el proceso de unificación de todos los sectores revolucionarios, democráticos y consecuentes del movimiento obrero colombiano, y particularmente de Santander, que culmine en una nueva y poderosa CENTRAL OBRERA, ANTI-IMPERIALISTA Y ANTI-OLIGÁRQUICA, hemos, después de varias conversaciones, concertado una alianza a nivel de nuestras organizaciones en base a estos principios:
1. DEFENSA DE LOS DERECHOS E INTERESES DE LA CLASE OBRERA Y EL PUEBLO COLOMBIANO;
2. LUCHA Y AISLAMIENTO CONTRA LAS CAMARILLAS DIRIGENTES DE LA UTC Y CTC, QUE REPRESENTAN LOS INTERESES POLÍTICOS ESTRATÉGICOS DEL IMPERIALISMO YANQUI DENTRO DE LA CLASE OBRERA;
3. RESPETO A LA PARTICIPACIÓN DE TODAS LAS FUERZAS DEMOCRÁTICAS DEL PROLETARIADO EN SUS ORGANIZACIONES.
Desde luego nuestras organizaciones mantendrán su independencia y autonomía para desarrollar sus propias fuerzas y la libertad para criticar y denunciar las violaciones e incumplimientos a los principios señalados y aceptados ante las masas populares.
Consecuentemente, EL BLOQUE SINDICAL INDEPENDIENTE DE SANTANDER Y LA FEDERACIÓN SANTANDEREANA DE TRABAJADORES, hacemos un fervoroso y fraternal LLAMADO a todas las fuerzas sindicales independientes y democráticas del movimiento obrero, especialmente de Santander, a la lucha contra las medidas y políticas señaladas; al REPUDIO Y LUCHA PERMANENTE contra las camarillas dirigentes de la UTC y CTC, y a emprender hombro a hombro con nosotros la lucha por los derechos democráticos de nuestra clase y el resto del pueblo, REALIZANDO ACCIONES UNITARIAS Y MOVILIZACIONES en base a los principios arriba señalados.
POR LOS DERECHOS DEMOCRÁTICOS OBREROS Y POPULARES ¡ADELANTE!
AVANCEMOS UNIDOS HACIA UNA AUTÉNTICA CENTRAL OBRERA, INDEPENDIENTE Y DEMOCRÁTICA!!
BLOQUE SINDICAL INDEPENDIENTE DE SANTANDER (MOIR)
Por el Comité Ejecutivo: Salomón Pedraza y Alvaro Silva.
FEDEREACION SANTANDEREANA DE TRABAJADORES -FESTRA-
Por el Comité Ejecutivo: Luis José Morales y Gilberto Ayala.
2) LA UNIDAD OBRERA, UNA POLÍTICA DE PRINCIPIOS.
DEL PRIMER ENCUENTRO DE UNIDAD SINDICAL DEL SUR-OCCIDENTE. CALI. MARZO 17 Y 18 DE 1973.
El imperialismo norteamericano y sus lacayos nacionales siempre se han preocupado por mantener la división en el movimiento sindical. En 1946 durante el gobierno oscurantista de Ospina Pérez y aprovechando la reforma laboral de ese entonces fundan la UTC, bajo el tutelaje conservador. Posteriormente, en 1960 logran convertir a la CTC en un aparato reaccionario, cuando son expulsadas las fuerzas consecuentes.
En la actualidad Cuevas y Mercado han logrado que las centrales que dirigen recojan la ideología burguesa, apliquen la “conciliación de clases”, el economismo y el apoliticismo. Los señores Cuevas y Mercado como es de público conocimiento reciben subvención de la embajada yanqui y del Gobierno y son cómplices de todas la medidas antiobreras y siempre han traicionado a la clase obrera.
Sin embargo, la situación interna de las centrales UTC-CTC, no es color de rosa, están sumidos en agudas contradicciones como producto de que sus afiliados están indignados por sus entregas y traiciones descaradas. Para tratar de salvar la aguda crisis han recurrido al más cerrero anticomunismo, que es el arma predilecta del imperialismo norteamericano y sus lacayos colombianos que le han permitido cometer los más horrendos crímenes. El anticomunismo ha servido para mentener en postración a los sectores más atrasados políticamente de los trabajadores, la llamada política unitaria de los Cuevas y Mercado está asentada sobre la base ideológica del anticomunismo y con ella han llegado a macartizar y expulsar organizaciones enteras como la Federación de Trabajadores Libres del Cesar y Telecom. No obstante toda esa situación de represión y anticomunismo, hay una insubordinación interna contra la dirigencia nacional de esas centrales: el Sindicato de Paz del Río emitió comunicados en los que condena la política macartista de UTC; se desafilió el Sindicato de Trabajadores de Avianca de la CTC; y ahora con motivo de la aplicación de los “fondos regionales” muchas organizaciones de esas dos centrales se han pronunciado en contra de aquellos.
Es importante destacar las luchas libradas por la clase obrera en el marco de esta política represiva y de recorte de sus derechos: las resonantes huelgas de los trabajadores de Avianca, Telecom, de los servidores de la rama judicial y múltiples huelgas desarrolladas en la defensa de sus pliegos de peticiones, son una clara muestra de que la clase obrera no se somete a los designios del Gobierno y está dispuesta a romper todas las barreras que se le han tendido.
La Uunidad de la clase obrera
Se ha acusado a las fuerzas independientes de ser las causantes de la división de la clase obrera, pero la realidad es que la existencia de fuerzas sindicales no vinculadas a las dos centrales patronales, conforman el sector más importante del proletarido, han logrado ubicar a sus enemigos principales: El Imperialismo Norteamericano, los Gobiernos Proimperialistas y las Camarillas Nacionales de UTC y CTC y son esas fuerzas independientes las llamadas a jugar un papel de vanguardia en la superación de la división, la defensa de las conquistas y la vigorización de las luchas, abriendo el camino a la clase obrera por su organización gremial nacional.
Para que este Proceso Unitario tenga un desarrollo cada día más positivo y de consolidación permanente y progresivo, tenemos que tener en cuenta los diferentes matices que van a intervenir en él y garantizar la plicación de principios tales como la Democracia Sindical, es decir, garantizar el pleno derecho a la expresión a todos los grupos y tendencias, el respeto a la minoría y hacer uso de la mayoría únicamente cuando se trate de la defensa inquebrantable de los derechos e intereses de la clase obrera; debemos combatir el Sectarismo entre las diferentes fuerzas democráticas que participamos en la dirección de la clase obrera para centrar los ataques contra los enemigos principales; las discusiones que se den en el seno de estos Comités Unitarios deben girar concretamente alrededor de los problemas de la clase obrera y las salidas concretas para contrarrestar la ofensiva de los explotadores; BRINDEMOS SOLIDARIDAD indiscriminadamente: ésta, aplicada con plena consecuencia y honestidad nos permite el acercamiento de sectores obreros dominados por la ideología burguesa, a la vez contribuye a fortalecer las luchas que los diferentes sectores libren en la defensa de sus intereses.
Este problema de UNIDAD del movimiento obrero de ser discutido a nivel nacional en un GRAN ENCUENTRO NACIONAL DE UNIDAD SINDICAL que debemos realizar en el curso de este año.
Este PROCESO UNITARIO debe servir de apoyo a las luchas que libran en especial los sectores campesinos, que son nuestro principal aliado, por la tierra para el que la trabaja y la confiscación de la tierra a los grandes terratenientes; a los estudiantes, a los intelectuales y profesionales que luchan por expulsar la “cultura” del imperialismo norteamericano y de sus lacayos y por la democratización de la educación; y a los demás sectores de la población que sufren la opresión, explotación y represión del imperialismo yanqui y sus agentes nacionales.
El anchuroso camino de la UNIDAD, debe ser canalizado hacia la creación de la gran ORGANIZACIÓN GREMIAL DE LOS TRABAJADORES con una posición INDEPENDIENTE, ANTIIMPERIALISTA, ANTIOLIGÁRQUICA, que desarrolle la defensa de los derechos e intereses de la clase obrera y del pueblo, combata y aisle a las camarillas dirigentes de la UTC y CTC, y sirva a la LIBERACIÓN NACIONAL, del yugo del imperialismo norteamericano y a la realización de las transformaciones democráticas que necesita Colombia.
3) POSICIÓN UNITARIA DEL MOIR
Discurso pronunciado por el compañero Abel Rodríguez en el Encuentro Nacional Sindical, realizado en Bogotá, del 12 al 14 de octubre de 1973. En este Encuentro se programó el Congreso Sindical Unitario.
Compañeros delegados:
En nombre de la corriente sindical independiente, que a nivel nacional dirige el Movimiento Obrero Independiente y Revolucionario (MOIR), representada en este grandioso Encuentro por las organizaciones filiales de los Frentes Sindicales Autónomos de Antioquia y el Valle, del Bloque Sindical de Santander y demás sindicatos que bajo la misma orientación partidista han concurrido desde distintas regiones del país, la Costa, el antiguo Caldas, Tolima, Cundinamarca, Nariño, Meta y otros lugares, para expresar su incondicional respaldo a la política de unidad de la clase obrera, presento a ustedes un caluroso, emocionado y revolucionario saludo.
Como vocero de esta fuerza quiero ratificar una vez más el profundo interés que nos anima por sacar adelante el logro de una Central Unitaria, en respuesta a la imperiosa necesidad del movimiento obrero por agruparse en un núcleo batallador, orientado revolucionariamente, que le resuelva el gravísimo problema de dispersión, descoordinación y carencia de metas claras y comunes en sus filas, sin lo cual no será posible para la clase obrera enfrentar adecuadamente la política del imperialismo yanqui y sus lacayos dentro de nuestro país y derrotar definitivamente las camarillas dirigentes traidoras de la UTC y la CTC.
En anteriores ocasiones hemos expresado nuestra decisión de integrarnos activamente a las filas de las federaciones regionales de la CSTC, para facilitar con el aporte de nuestros efectivos un mayor robustecimiento de estas organizaciones, y dar al mismo tiempo los pasos necesarios para la efectiva realización del Congreso Nacional que ha de constituir la nueva central que reclama el proletariado. Quiero en esta ocasión ratificar una vez más este propósito y precisar de manera enfática las bases mínimas que exigimos para ponerlo en práctica de inmediato. Estas bases mínimas están consignadas en tres principios fundamentales enumerados cuidadosamente en la última edición del periódico TRIBUNA ROJA, órgano oficial del MOIR. A saber:
1) El compromiso sagrado de defender los intereses del proletariado y el pueblo por parte de las organizaciones federales a las que nos integremos, lo cual se concreta expresamente en la lucha sin cuartel contra el imperialismo yanqui y las clases antinacionales que en nuestro país detentan el Poder.
2) Combatir firmemente las camarillas dirigentes de la UTC y la CTC, agentes permanentes de la traición y la entrega contra nuestra clase, y
3) El respeto y la garantía de la democracia sindical, lo que significa la libertad interna de opinión, el respeto a la minoría, la obediencia de ésta a la mayoría y la supresión de las maniobras y los métodos burocráticos para imponer las decisiones al margen del libre juego democrático.
Sobre estas bases, que los aquí militantes del MOIR consideramos están contempladas en la ponencia propuesta por la Comisión Preparatoria del Encuentro Nacional, vamos a dar inmediatamente el paso de afiliar nuestras organizaciones sindicales a las federaciones regionales de la CSTC. Esto significa que desde el mismo momento en que concluya esta solemne reunión todos los militantes y simpatizantes del MOIR a nivel nacional estaremos empeñados en la tarea de llevar las organizaciones sindicales donde tenemos mayoría al seno de las de la CSTC, y batallando porque este sea el camino que tomen aquellas donde aún somos una fuerza minoritaria.
Igualmente sumaremos nuestro modesto caudal y nuestro esfuerzo al de las organizaciones sindicales independientes comprometidas con la política de unidad, en aquellas regiones del país que aún carecen de federaciones, para integrar estas y adherirlas a la nueva Central Unitaria.
Mientras el respeto a los principios de unidad revolucionaria de la clase obrera, contemplados en la ponencia que hemos de aprobar aquí, sean mantenidos, tienen todos ustedes, compañeros delegados al I Encuentro Nacional Sindical, la palabra de honor del MOIR de que esta será nuestra inmodificable línea de conducta.
Muchas gracias.
4) DE LA CSTC Y EL UNIR AL ENCUENTRO NACIONAL SINDICAL DE AGOSTO
Los siguientes son los apartes principales del proyecto de ponencia presentado conjuntamente por la Confederación Sindical de Trabajadores de Colombia (CSTC) y el Comité de Unidad Intersindical Regional de Cundinamarca (UNIR) a consideración y estudio del Encuentro de Consulta Nacional Sindical, que se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá, durante los días 5 y 6 de agosto de 1973.
Desde su nacimiento la clase obrera colombiana ha estado combatiendo la política del imperialismo norteamericano y sus agentes, los terratenientes y la burguesía comercial importadora. Ha enfrentado con valor y decisión al imperialismo norteamericano y las oligarquías de nuestra patria, realizando memorables luchas en la defensa de la soberanía nacional y contra la explotación extranjera. Así mismo, con su incansable esfuerzo y unidad el proletariado colombiano conquistó en el pasado los derechos de organización sindical, contratación colectiva, huelga y demás garantías esenciales para la defensa de sus intereses. Testimonio de ello, son las grandes huelgas de los trabajadores de las bananeras, los petroleros, Fedenal y muchas más.
El camino glorioso de la clase obrera, sus luchas, sus combates, han determinado para el proletariado colombiano experiencias que le permiten hoy avanzar decididamente por el camino de la unidad, requisito esencial para enfrentar con éxito la lucha contra los enemigos del pueblo y la nación colombiana. El avance unitario de la clase obrera le permitirá aglutinar, dirigir y llevar a cabo con exito las alianzas con los campesinos, los estudiantes, intelectuales demócratas y con los demás sectores de la población que sufren las consecuencias de la dominación imperialista.
Causas de la división de la clase obrera
Al imperialismo le preocupa la existencia de un movimiento sindical independiente, consecuente con los interesesde la clase obrera y las masas populares, y siempre se ha preocupado por mantener la división en el seno del movimiento obrero. La creación de la UTC en 1946 y la posterior división en 1960 de la CTC, no han tenido más que el propósito de ejercer el control del proletariado colombiano sobre la base de su división.
CUEVAS Y MERCADO han logrado poner bajo su férula esas dos centrales y colocarlas al servicio incondicional de los planes del imperialismo. Estos traidores, es de público conocimiento, reciben subvención de los Estados Unidos y del gobierno colombiano. Para tratar de salvarse de la crisis han recurrido al más severo anticomunismo, arma predilecta del imperialismo norteamericano, de las clases explotadoras y sus agentes, a nombre del cual cometen los más horrendos crímenes.
La proyectada fusión de UTC y CTC tiene la base ideológica del anticomunismo y ha servido para macartizar y expulsar organizaciones enteras como la Federación de Trabajadores Libres del Cesar y el Sindicato de Telecom. Esta política represiva no ha podido impedir la insubordinación interna contra estas camarillas: el Sindicato de Paz del Río condenó la política anticomunista de UTC, el Sindicato de Avianca se desafilió de CSTC y numerosas organizaciones sindicales han venido fortaleciendo el movimiento obrero independiente del país.
Marcha ascendente de la unidad
Hoy se vive un gran proceso de unidad de la clase obrera, lo que ha determinado inclusive que bajo la presión y la lucha de los trabajadores y e pueblo, el Gobierno se vea obligado a presentar un proyecto de ley de amnistía para los trabajadores petroleros. Es necesario destacar la gran contribución que a este proceso han dado los diferentes encuentros de unidad, realizados en el Valle, Antioquia, Santander, Cundinamarca, Meta y otras regiones del país; el destacado papel de los diferentes Comités de Unidad que existen en todas las regiones del país y la existencia de la CSTC, que como Central independiente y democrática propuso el año pasado la realización de un Gran Encuentro Nacional de Unidad e inclusive ha manifestado en documentos su disposición de cambiar de nombre si ello asegura la constitución de una central más amplia, donde se dé cabida a la gran mayoría del movimiento obrero. Son estas fuerzas independientes las llamadas a jugar un papel decisivo en la superación de la división, la defensa de las conquistas y la vigorización de las luchas, despejando el camino a la clase obrera para su integración en un futuro cercano en una CENTRAL ÚNICA INDEPENDIENTE Y DEMOCRÁTICA, que permitar aislar y derrotar al minúsculo grupo de vendeobreros que comandan CUEVAS y MERCADO y las ideologías anarquistas dentro del movimiento sindical.
Democracia interna
Este proceso ha venido siendo garantizado con la aplicación de principios democráticos.
Hay que reconocer la existencia de diversas corrientes y matices en el seno de la clase obrera; practicar la plena democracia sindical en forma consecuente y unitaria entre los diversos sectores o tendencias, en la defensa inquebrantable de los intereses de los trabajadores y del pueblo.
Gran encuentro nacional de unidad sindical
Hemos culminado la primera etapa de este proceso unitario. Hemos hecho conocer la posición del movimiento sindical de mayor conciencia de clase en la lucha por la unidad de la clase obrera, hemos discutido y aprobado una política antiimperialista de lucha contra el gobierno, las camarillas vendeobreras de Cuevas y Mercado y una indoblegable decisión en la defensa de los intereses de la clase obrera y del pueblo.
Más de medio millar de sindicatos estamos comprometidos en las tareas señaladas por los distintos Encuentros Regionales. Este Proceso de Unidad del Proletariado Colombiano es ya irreversible. Hace parte del avance de su conciencia de clase, de las respuestas que en resonantes batallas ha venido dando a la política del imperialismo y del gobierno; basta citar para ello las huelgas de los petroleros, de los trabajadores de Telecom, de los maestros, de los médicos, los cementeros y muchas más. Las grandes movilizaciones del 1° de mayo realizadas por la clase obrera, hacen parte también de las derrotas que la clase obrera y los pueblos del mundo y de América Latina con particularidad han venido infringiendo al imperialismo yanqui y a todos sus agentes; ejemplo de esto es la gloriosa lucha del pueblo vietnamita, de Cuba y de Chile, etc. Nadie ni nada podrá impedir que la clase obrera colombiana se ponga al frente de la lucha de liberación nacional y dirija a las demás clases en la tarea por construir UNA REPÚBLICA INDEPENDIENTE, POPULAR Y PRÓSPERA EN MARCHA AL SOCIALISMO.
Hoy estamos ante la realización del gran Encuentro Nacional de Unidad Sindical
En él, podrán participar todas las organizaciones que estén de acuerdo con la política expresada y que sustenta las bases de la unidad. El Encuentro Nacional además de discutir y examinar las medidas del imperialismo y del Gobierno, contra la clase obrera y el pueblo, determinar formas de solidaridad con las luchas del proletariado, los campesinos, los estudiantes e intelectuales demócratas, señalar derroteros para enfrentar con éxito los futuros combates del movimiento sindical, deberá indudablemente ocuparse, como aspecto principal, de lo relacionado con la Unidad de la Clase Obrera Colombiana y determinar los métodos y la manera democrática como llegaremos a ese gran anhelo de la clase obrera: LA CONSTRUCCION DE UNA CENTRAL UNICA, INDEPENDIENTE Y DEMOCRÁTICA!!!
VIVA LA UNIDAD DE LA CLASE OBRERA COLOMBIANA!!!
VIVA EL GRAN ENCUENTRO NACIONAL DE UNIDAD SINDICAL!!!
CONFEDERACION SINDICAL DE TRABAJADORES DE COLOMBIA (CSTC)
PASTOR PEREZ-GUSTAVO OSORIO-TEOFILO FORERO
COMITES DE UNIDAD INTERSINDICAL REGIONAL DE CUNDINAMARCA (UNIR)
HECTOR MOLINA
AGUSTIN GONZALEZ
FRANCISCO SANDOVAL
ABEL RODRIGUEZ
Bogotá, agosto 5 y 6 de 1973
5) DE LA AFILIACION DE ACEB A LA CSTC
Publicamos el tercer considerando de la resolución de la Asociación Colombiana de Empleados Bancarios (ACEB), por medio de la cual se afilió a la CSTC, en el que se recogen los principios básicos que fundamentan la política unitaria de la clase obrera. Estos principios orientaron la vinculación de un sinnúmero de organizaciones sindicales a la CSTC, y hoy siguen siendo guías seguras de sus luchas.
La Asociación Colombiana de Empleados Bancarios “ACEB” ha respondido consecuentemente al llamado unitario de la CSTC y de los bloques sindicales independientes y se ha vinculado a la tarea de crear los Comités de Unidad Intersindical Regional existentes en todo el país, los cuales se convirtieron en los dos últimos años en el polo de atracción del sector más avanzado del movimiento obrero colombiano. Tal como lo ordenó la VIII Convención Nacional de Delegatarios, la ACEB, ha defendido y defenderá en todo este proceso los principios que nos han guiado para lograr la unidad.
En primer lugar, ser consecuente con la defensa de los intereses del proletariado y el pueblo; luchar por las reivindicaciones económicas, políticas y sociales de los trabajadores y pugnar porque la nueva central sirva en la lucha por liberar a nuestro país del yugo de la gran burguesía y de los terratenientes, aliados del imperialismo norteamericano.
En segundo lugar, luchar por aislar a las camarillas de las centrales UTC y CTC por ser esquiroles infiltrados en el movimiento obrero, y cómplices de todas las medidas antipopulares y antiobreras gestadas por los gobiernos del Frente Social.
En tercer lugar, defender los principios de la democracia sindical tendientes a garantizar la libertad interna de opinión y el funcionamiento correcto de la nueva central. Solo así se impide el sectarismo y se crea un ambiente de fraternidad y de estudio serio de los problemas, lo que desarrollará la conciencia de clase de los trabajadores y fortalecerá la unidad y cohesión en sus filas.
Aprobado en Bogotá, el 3 de agosto de 1974.