Despreciando la represión y las amenazas del régimen fascista de Pastrana y los falsos ofrecimientos de su segundón incondicional, Luis Carlos Galán, más de cien mil educadores, con el resuelto respaldo de las amplias masas de estudiantes y padres de familia libran en este momento en todo el país una batalla grandiosa y frontal contra el Estatuto Docente impuesto por el gobierno en febrero pasado.
Nunca antes había tenido un carácter tan revolucionario la lucha de los maestros. La exigencia de abolición del Estatuto Docente cocinado por
el gobierno de Pastrana de acuerdo a los deseos de explotación y opresión del imperialismo yanqui, es una exigencia revolucionaria que tiene el incondicional apoyo de la clase obrera, del campesinado y del resto del pueblo colombiano.
Ni las cárceles, ni la violencia policial, ni las amenazas de despido, ni el chantaje ni las maniobras del gobierno, podrán detener o torpedear este grandioso y combativo paro nacional de los trabajadores de la educación.
Irrevocable y firme es la decisión del magisterio: enterrar de manera definitiva el Estatuto Docente de Pastrana y conseguir el resto de sus justas reivindicaciones.
Vacilantes y amenazadores, Pastrana y Galán han tachado el paro nacional de “subversivo” y “lesivo de los intereses nacionales”. Pero los trabajadores de la educación bien saben qué es lo que subvierte y que lesiona el decreto 223 de febrero pasado. En carne propia han sufrido los recortes a los derechos de organización, huelga y expresión con la ahora ratificada clasificación como empleados públicos. Todos los días han visto sacrificada su estabilidad en manos de los manzanillos de los partidos reaccionarios y de cualquier autoridad del gobierno o del clero. Ahora saben exactamente que significan las categorías del escalafón establecido en el estatuto pastranista y todo el resto de sus medidas antipopulares y reaccionarias, que atentan no sólo contra los intereses del magisterio sino en general contra los intereses del pueblo colombiano.
Por eso las amplias masas de los trabajadores de la educación en todo el país han levantado una bandera unificada de lucha por la abolición del Estatuto de Pastrana. Su combativo paro nacional hace parte por completo de la gran batalla de los obreros, campesinos y el resto del pueblo por la defensa de sus derechos democráticos y políticos y por una nueva cultura nacional y científica, al servicio de las masas populares, en contra de la dominación del imperialismo norteamericano y sus lacayos, la gran burguesía y los grandes terratenientes.
El Frente Popular-MOIR ratifica su total e irrestricta solidaridad con la actual grandiosa lucha de los maestros y apoya de manera decidida las formulaciones hechas por los Trabajadores Revolucionarios de la Educación (TRE) consignadas en su Proyecto de Programa Mínimo de Lucha bandera revolucionaria que se opone a las maquinaciones imperialistas y que ha sido acogida con entusiasmo por amplios sectores del magisterio, como el Encuentro Nacional de INEM en Cali, la asamblea distrital de secundaria, el comité distrital de paro y en varias asambleas de base de los educadores en todo el país.