Aurelio Suárez Montoya, director ejecutivo de Salvación Agropecuaria
En el Tolima, el presidente nacional de Salvación Agropecuaria, Ángel María Caballero, acompañado del alcalde de Saldaña, José Vidal Oyuela, tres diputados, varios concejales, campesinos, agricultores, maestros y estudiantes, encabezó la manifestación contra el TLC, acompañado por s. Allí se denunció que tanto el Alca como el TLC intensificarán la apertura económica, con la cual Colombia perdió más de un millón de hectáreas de cultivos transitorios y que, por tanto, la suscripción de los nuevos tratados refuerza el modelo neoliberal.
«¡Arriba el arroz del Tolima, abajo el arroz gringo!», era la consigna que gritaban los agricultores del sur del departamento, lo mismo que los de Prado y Purificación, en la marcha de rechazo al TLC y fue también la que se coreó en Lérida, donde se adelantó una movilización con centenares de participantes. En Fresno, al norte del Tolima, centenares de cafeteros rechazaron igualmente el TLC.
En Villavicencio, los agricultores agrupados en la Asociación de Agricultores y Ganaderos del Meta, Agameta, salieron a las calles con sus equipos y camionetas. En nombre de los agricultores y ganaderos, Eudoro Álvarez rechazó los acuerdos de libre comercio y llamó a la resistencia civil en defensa de la producción nacional. Participaron también la CUT regional y otras filiales regionales de Salvación Agropecuaria.
En Cali confluyeron en la plazoleta del Centro Administrativo Municipal más de tres mil manifestantes del norte del Cauca, el centro del Valle, Palmira, Florida y Yumbo.
Tras recorrer las calles de la capital caucana, Popayán, y liderados por los agricultores agrupados en Agropemca, centenares de manifestantes se concentraron en la Arcada de la Herrería y se comprometieron a continuar con las tareas contra los oprobiosos tratados. Al sur del país, en Pasto, alumnos de la Universidad de Nariño lideraron la protesta, en que participaron también cultivadores de café.
Cerca de Calarcá, en la glorieta Versalles, sectores productivos del Quindío, encabezados por los dirigentes de Unidad Cafetera, Dimas Arias y Antonio Gutiérrez, ratificaron que «la firma de los tratados se traducirá en la ruina total de la industria, la agricultura y el comercio».
En Antioquia, centenares de campesinos procedentes de Jardín, Andes, Pueblo Rico, Santo Domingo, El Santuario y Cisneros se congregaron en el municipio de Caldas para protestar contra las negociaciones. Allí, el coordinador departamental de Salvación Agropecuaria, Jorge Gómez, y el presidente regional de Unidad Cafetera, Eugenio Ramírez, reiteraron que el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos implicará renunciar a ingresos por 1.600 millones de dólares anuales, que le ingresan al gobierno, y se correrá el riesgo de ver al país ahora sí totalmente inundado de productos subsidiados.
En Neiva, más de 500 activistas desfilaron por las calles de la capital huilense y durante varias horas agitaron las principales consignas en el centro de la ciudad. Directivos de la Central Unitaria de Trabajadores y del sector agropecuario del Huila, con Mercedes Lizcano a la cabeza, cumplieron con las tareas. En La Virginia, departamento de Risaralda, se adelantaron labores similares. También en Pereira, columnas de manifestantes realizaron una marcha que culminó con un mitin frente al Hospital San Jorge, que atraviesa por la peor crisis de su historia.
Y las voces de protesta también se escucharon en Barranquilla (Atlántico), Valledupar (Cesar), Bucaramanga y Barrancabermeja (Santander), Florencia (Caquetá) y Arauca, en el departamento del mismo nombre. En Caldas y Magdalena, y en la capital de la República, Bogotá, donde una emotiva marcha, a pesar de la lluvia, se concentró frente al Ministerio de Comercio, para señalarle su rechazó categórico al equipo negociador del TLC.